Guion de ceremonia personalizado
Si sois de los que tenéis a vuestro alrededor alguien con chispa y que se anime a ser vuestro «cura«, apuntaros este servicio porque os vendrá como anillo al dedo, nunca mejor dicho.
Le proporcionaremos el texto, le brindaremos los mejores consejos y tendrá las herramientas clave para que la ceremonia sea un éxito.
Con ellos, así lo hicimos.
Paz & David
Sucede que, a veces, solo con mirar a alguien tenemos la certeza de haber estado con ella desde siempre. Así, sin conocerse de nada, como si de repente entendiéramos lo que Cortázar quería expresar con eso de “me basta mirarte para saber que con vos me voy a empapar el alma”.
Y es que a veces no hace falta ni que conozcas a esa persona, ni que te la presenten. Basta con verla y notar ese ¡Boom! Seguro que sabes de lo que hablo, del flechazo, del amor a primera vista, cuando sientes esa sacudida, esa atracción que apenas tiene explicación.
Hace 17 años, en el Valle de la Serena … ¡Boom!
Rebeca y Oscar
A veces, el amor llega y se construye poco a poco. Curiosamente, esa persona que has tenido desde hace años delante de tus ojos y que ha pasado desapercibida, de repente, sin darte cuenta, se convierte en tu mejor amigo, se convierte en tu confidente y se convierte en tu todo. Esta historia comenzó así. Porque un día Rebeca, miró a Oscar así, “con otros ojos”. Otros ojos que veían más allá, los ojos con la virtud de ver lo bonito de dentro, los que miran de verdad. Y bastó ese pequeño instante de conexión entre los dos, para acercaros, y lograr miraros como si fuera la primera vez que lo hacíais.
Alexandre Dumas resume en una frase: “Hay dos miradas; la mirada del cuerpo puede olvidar a veces, pero la del alma recuerda siempre”. Desde ese preciso instante, vosotros dos os recordasteis.
Podréis estar tranquilos y centraros en lo verdaderamente importante: disfrutar de cada instante de un día irrepetible
¿Hablamos?